Este factor refleja la tendencia de crecimiento o contracción de la demanda de los consumidores mediante el cálculo de la tasa de cambio interanual del índice de consumo mensual de las empresas cotizadas en el sector de consumo. El índice de consumo mensual se calcula sumando las ventas diarias de la empresa dentro del mes y normalizándolo utilizando el índice de ajuste de cantidad de consumidores. La tasa de cambio interanual mide la diferencia entre el índice de consumo del mes actual y el mismo período del año pasado. La base teórica de este factor es que el gasto de los consumidores es una parte importante de las actividades económicas y puede reflejar cambios en la macroeconomía y la confianza del consumidor. Al mismo tiempo, el consumo actual tiene un impacto directo en los ingresos y beneficios futuros de las empresas. Estudios empíricos han demostrado que los datos de consumo tienen una correlación positiva significativa con las ganancias de la empresa en los próximos tres trimestres. Especialmente en el sector de bienes de consumo no esenciales, esta correlación es más evidente en las acciones de pequeña y mediana capitalización. El factor está correlacionado positivamente con los rendimientos futuros de las acciones, lo que indica que la expansión del consumo generalmente indica un aumento en los ingresos y la rentabilidad de la empresa, lo que impulsa al alza los precios de las acciones.