Las ganancias retenidas por acción (GRA) proporcionan una perspectiva para medir la rentabilidad acumulada a largo plazo de una empresa y el valor del patrimonio de los accionistas. Este indicador se puede utilizar junto con otros indicadores por acción (como las ganancias por acción, GPA, y el valor neto de los activos por acción, VNA) para evaluar de manera más integral la condición financiera y el valor de inversión de una empresa. Además, la tendencia de crecimiento de las GRA también es un indicador al que vale la pena prestar atención, ya que refleja la acumulación y el crecimiento a largo plazo de la rentabilidad de una empresa. Los inversores pueden combinar el promedio de la industria y los datos históricos para determinar si las ganancias retenidas de la empresa son suficientes para respaldar sus planes de desarrollo futuros. Cabe señalar que una GRA excesivamente alta también puede indicar que la empresa no ha utilizado plenamente sus beneficios para la reinversión o la rentabilidad de los accionistas. Por lo tanto, un nivel razonable de GRA depende de la etapa de desarrollo de la empresa y de las características de la industria.